TEATRO VIRGINIA

El Ayuntamiento de San Martín va a cometer un tremendo error en el desarrollo del denominado plan especial de reforma interior (unidad ST-13 que comprende los terrenos entre el Teatro Virginia y la plaza del Ayuntamiento). Cierto es que la zona está hecha un desastre urbanístico y que su reordenación va a ser muy positiva para Sotrondio, sin embargo IU-BA valoramos que la reordenación no cumplirá con sus objetivos si tal como propone el PSOE convierte el Teatro Virginia en un solar, respetando únicamente la fachada, culminando la barbaridad con una incoherencia tan grande como dejar su terreno para ubicar un centro de salud cuando hay una necesidad real de un espacio como casa de la cultura.
Sotrondio claramente necesita nuevas instalaciones sanitarias, pero sacrificar el Virginia teniendo opciones en mejores emplazamientos es bastante pobre y de muy poca visión de futuro en la concepción de un urbanismo integrador. En su día nuestro Grupo Político proponía la zona de La Capilla, pero el PSOE no quiere escuchar.
IU-BA siempre hemos defendido la recuperación del emblemático Teatro y su aprovechamiento para fines culturales, llegando a requerir la intervención del Defensor del Pueblo ante el pasotismo del Equipo de Gobierno que viendo el deterioro no quiso valorar este importante elemento del patrimonio cultural del concejo.
Sinceramente me temo lo peor y que la historia del Teatro Virginia termine como la de las Escuelas de Blimea que hoy albergan el Centro Mancomunado de Consumo, culla fachada “respetada” es una aberrante chapuza a la vista de todos. Sotrondio, como todos los pueblos tiene su identidad conformada por sus gentes y sus edificios singulares. La desaparición del Teatro Virginia, aun conservando su cáscara será una pérdida irreparable.
Yo, personalmente creo que llegados a este punto toca a la ciudadanía ir por delante de esta política depredadora y moverse.
Experiencias como la del Teatro Pilar Duro de Langreo del que solo quedan añoranza y fotografías en algún porfolio son buen ejemplo de lo que en un futuro, si esta barbaridad no se para nos espera:
Echarnos las manos a la cabeza y lamentarnos diciendo... ¿Cómo se pudo consentir?
No me gustan las lamentaciones; Estamos en tiempo de evitar la herida.

Movámonos.
Julio Antuña Coordinador IU-SMRA