2 de agosto de 2008

EL EFECTO MARIPOSA


“El EFECTO MARIPOSA”

Alguien ha debido comentar al Sr. Zapatero la teoría presentada en 1963 por el meteorólogo Edward Lorenz, para mostrar la interconexión del mundo. Esta teoría sostiene que, dadas unas condiciones iniciales de un determinado sistema natural, la más mínima variación puede provocar que evolucione en formas totalmente diferentes; es decir, una pequeña perturbación, mediante un proceso de amplificación, puede provocar un efecto considerablemente grande y como ejemplo ponía “el movimiento de las alas de una mariposa en Shangai que podía provocar un huracán en el mar Caribe”.
El problema de las teorías es su aplicación practica, porque cada uno las interpreta como quiere. Yo creo que el Sr. Zapatero y el Sr. Solbes creen en esa teoría, pero la han entendido mal y al revés. No tiene explicación su reacción ante la crisis (ya oficialmente reconocida, aunque sea a regañadientes). Cuando debería ser hora de medidas políticas, económicas y sociales, se centran en pedir a la ciudadanía que “consuma y seamos optimistas”. Parece poco serio su planteamiento, pero lógicamente para afrontar un problema hay primero que reconocer su existencia y ellos no reconocen la seriedad de la situación. Lo demuestran anunciando temerariamente el fin de la recesión para el 2º semestre de 2009, en ese sentido encaja pedir a la gente que confíe en el optimismo y que consuma. A priori dos medidas burdamente sencillas a las que ZP fía su efecto encadenado en la economía, pero aunque los españolitos comunes queramos ser optimistas, la base de nuestros bolsillos cada día está más profunda y así optimismo poco y a la hora de comprar... a pensarlo dos-tres-seis veces.
El efecto mariposa de ZP es superado por el efecto “dominó” que cae una ficha y empuja a la siguiente y la siguiente... Cae la construcción, empuja a las inmboliarias como Martín-Fadesa, subcontratas, albañiles, fontaneros, carpinteros, agencias de viaje, Spanair, a ti, a mi... y muchas otras que ya se tambalean.
El Gobierno puede y debe mover ficha en la economía. Planteando medidas relacionadas por ejemplo con el desarrollo de las energías renovables y obras públicas se abriría un campo inmenso a la recuperación. O puede seguir con medidas estúpidas de carambola, como aquella de recolocar los excedentes de la construcción en la hostelería, evidenciadas por la pregunta: ¿dónde se recolocarán los camareros afectados por la crisis?. Cuando hay crisis toda la sociedad nos vemos afectados. Tener una estrategia es fundamental para afrontarla.
Fiar la solución al “efecto mariposa” no es garantía. Mejor mover fichas o la cosa irá a peor, por mucho optimismo que se le quiera echar.

Julio Antuña Román
Coordinador IU-SMRA

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