El portavoz de Izquierda Unida en el Congreso, Gaspar Llamazares, presentó hoy la proposición no de ley registrada a través del Grupo Parlamentario de ERC-IU-ICV para que la Cámara vote la compra de acciones en Repsol por parte del Estado. Llamazares recordó que fue IU la única formación que hace años se opuso a la privatización de empresas estratégicas públicas, lo que habría garantizado la defensa “frente a tiburones” como la rusa Lukoil, que en la actual situación de crisis pretenden hacerse con el control del 30 por ciento de la petrolera española.
A su juicio, sólo con la participación pública como ocurre en otros Estados de la UE se puede garantizar el control nacional de empresas estratégicas como Repsol. Por ello, exige al Gobierno socialista que abandone su “pasividad y deje de mirar para otro lado. El Ejecutivo se juega su credibilidad”.
El parlamentario de IU entiende que “no basta con dar lecciones a los demás para controlar el sistema financiero. Hay que aprender de la crisis también asumiendo lecciones propias en el control de sectores estratégicos como el de la energía”.
Por ello, la proposición no de ley registrada hoy insta al Gobierno a revisar la política de privatizaciones y a fortalecer la participación pública en los sectores estratégicos, como el energético, “que presenten situaciones de vulnerabilidad”.
La iniciativa pide que se definan qué sectores son estratégicos para los intereses generales, que se intervenga en ellos con la compra de paquetes públicos de acciones, al tiempo que en lo que respecta al sector de la energía se establezca cómo garantizar el suministro y se pueda planificar un modelo energético sostenible.
Además, la iniciativa de IU-ICV insta a revisar la ley de los sectores eléctrico y de hidrocarburos con una planificación “para todo el país y con la participación de las CC.AA”, con criterios de sostenibilidad, mejora de la eficiencia y del ahorro energético, gestión integrada y garantía de suministro.
Llamazares mostró su “seria preocupación” de que tanto el Gobierno socialista como el PP estén “en un juego de pelota que no lleva a ninguna parte con el que eluden su corresponsabilidad en la privatización de las empresas públicas. En buena parte de ahí se deriva la fragilidad, entre otras, de Repsol”.
“Estamos atrapados entre el oportunismo del PP, que ahora se convierte al intervencionismo, y la pasividad del Gobierno, que ahora se convierte al liberalismo. Es el mundo al revés”, valoró.
Para Llamazares, “quien ha privatizado las empresas públicas, no puede lamentar hoy la compra de las mismas por parte de compañías extranjeras. Y quien mira para otro lado, no ejerce como gobierno. Se debe intervenir en defensa de esas empresas y, sobre todo, los intereses generales”.
En esta situación, calificó de “parche”, “sucedáneo” y “estrategia fracasada” el que se sigan buscando núcleos de control privados para estas compañías entre los bancos y las empresas constructoras. Al tiempo, criticó que José Luis Rodríguez Zapatero reivindique su “no intervencionismo”, ya que “sin intervencionismo y sin participación pública, la petrolera estará en manos del mejor postor internacional, lo que acabará por debilitar la economía” del país.
La iniciativa parlamentaria registrada se completa promoviendo, en el marco de la Unión Europea, la constitución de sectores públicos o consorcios público-privados en sectores estratégicos
A su juicio, sólo con la participación pública como ocurre en otros Estados de la UE se puede garantizar el control nacional de empresas estratégicas como Repsol. Por ello, exige al Gobierno socialista que abandone su “pasividad y deje de mirar para otro lado. El Ejecutivo se juega su credibilidad”.
El parlamentario de IU entiende que “no basta con dar lecciones a los demás para controlar el sistema financiero. Hay que aprender de la crisis también asumiendo lecciones propias en el control de sectores estratégicos como el de la energía”.
Por ello, la proposición no de ley registrada hoy insta al Gobierno a revisar la política de privatizaciones y a fortalecer la participación pública en los sectores estratégicos, como el energético, “que presenten situaciones de vulnerabilidad”.
La iniciativa pide que se definan qué sectores son estratégicos para los intereses generales, que se intervenga en ellos con la compra de paquetes públicos de acciones, al tiempo que en lo que respecta al sector de la energía se establezca cómo garantizar el suministro y se pueda planificar un modelo energético sostenible.
Además, la iniciativa de IU-ICV insta a revisar la ley de los sectores eléctrico y de hidrocarburos con una planificación “para todo el país y con la participación de las CC.AA”, con criterios de sostenibilidad, mejora de la eficiencia y del ahorro energético, gestión integrada y garantía de suministro.
Llamazares mostró su “seria preocupación” de que tanto el Gobierno socialista como el PP estén “en un juego de pelota que no lleva a ninguna parte con el que eluden su corresponsabilidad en la privatización de las empresas públicas. En buena parte de ahí se deriva la fragilidad, entre otras, de Repsol”.
“Estamos atrapados entre el oportunismo del PP, que ahora se convierte al intervencionismo, y la pasividad del Gobierno, que ahora se convierte al liberalismo. Es el mundo al revés”, valoró.
Para Llamazares, “quien ha privatizado las empresas públicas, no puede lamentar hoy la compra de las mismas por parte de compañías extranjeras. Y quien mira para otro lado, no ejerce como gobierno. Se debe intervenir en defensa de esas empresas y, sobre todo, los intereses generales”.
En esta situación, calificó de “parche”, “sucedáneo” y “estrategia fracasada” el que se sigan buscando núcleos de control privados para estas compañías entre los bancos y las empresas constructoras. Al tiempo, criticó que José Luis Rodríguez Zapatero reivindique su “no intervencionismo”, ya que “sin intervencionismo y sin participación pública, la petrolera estará en manos del mejor postor internacional, lo que acabará por debilitar la economía” del país.
La iniciativa parlamentaria registrada se completa promoviendo, en el marco de la Unión Europea, la constitución de sectores públicos o consorcios público-privados en sectores estratégicos
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